Una de gatos
El jardín está lleno de gatos gordos y perezosos. No siempre fue así. Aún recuerdo los tiempos en que para ver un gato era necesario esconderse varias horas tras unos matorrales, inmóvil y en silencio. Los gatos aparecían al atardecer,…
El jardín está lleno de gatos gordos y perezosos. No siempre fue así. Aún recuerdo los tiempos en que para ver un gato era necesario esconderse varias horas tras unos matorrales, inmóvil y en silencio. Los gatos aparecían al atardecer,…
Resulta desesperante comprobar la tasa de paro, superior al 20% de la población activa (y al 30% en dos comunidades), y ver que los políticos se encogen de hombros, como si se les exigiera luchar contra las corrientes oceánicas, la…