LIQUIDACIONES EN EL MINISTERIO DE DEFENSA.

La necesidad del gobierno de reducir el déficit de manera drástica le está llevando a cometer errores de bulto.

Los socialistas españoles nunca han sido partidarios de gastar dinero en Defensa, así que no era de extrañar que uno de los ministerios que más recorte sufriese fuese el Ministerio de Defensa.

Pero hay maneras y maneras de recortar el gasto. Los socialistas han elegido la peor. En vez de ir a un Ministerio de Defensa que cumpliese los objetivos, a mi modo de ver, esenciales de la defensa nacional del siglo XXI :

Centrarse en las amenazas más cercanas.
Disuasión creíble.
Superioridad en el campo de batalla.
Minimizar bajas.

Hacen todo lo contrario. Y encima despilfarrando dinero para obtener liquidez a corto plazo.

Van a malvender un armamento que nos daría todos los objetivos que he puesto. Y digo malvender porque cuando las cosas se quieren vender con prisa, y más en este caso, no se suele obtener un buen precio.

En cambio nos vamos a quedar con un material bélico obsoleto y con un alto coste en mantenimiento y que no nos garantiza la disuasión. Y por supuesto también nos vamos a quedar con un ejército sobredimensionado en personal.

Otros proyectos como el Talarion se congelan.

En fin, ni nuestro ejército es competitivo.

Arturo Taibo
Arturo Taibo

Economista. Liberal. Cansado de ver como se engaña a la gente y como se desperdician las posibilidades de desarrollo económico. Intentando que la gente aprenda un poco de Economía.

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4 comentarios

  1. La defensa tambien es industria ya ahi va la Chacon a venderle a los arabes -tan necesitados los pobres- unos cien leopard. No todo es pues negativo para nuestra «defensa» nacional. Para nuestro bolsillo si es negativo que exista la tal señora (defensa): 10 % del presupuesto se va por ahi. Nada, eso lo ganamos todos en un añito.  (Para la defensa externa y la interna claro).

  2. Esta gente es como un hipotético padre de familia que, ante una situación en la que se impone apretarse el cinturón, dejara a sus hijos sin cena, sin calzado y sin agua caliente, vendiera los muebles y los electrodomésticos, mientras él se compra un traje nuevo y se va de francachela con los amigotes (y no, no estoy hablando de Homer Simpson)
    Es un despropósito sobre otro despropósito. Hay infinidad de partidas presupuestarias mucho menos necesarias que no se tocan, gastos mucho más superfluos que la defensa, pero que por lo visto al gobierno le resultan más convenientes políticamente. Por otro lado, la defensa nacional nunca ha interesado a la progresía; es más, ni siquiera entiende el concepto, porque ellos llevan la idea de enemigo y de guerra al terreno de la política contra el adversario ideológico. Nótese que el enemigo exterior puede ser incluso un aliado dentro de esa visión del mundo.
    Por otro lado, también se hizo evidente, desde el mismo instante en que Carme Chacón fue nombrada Ministra de Defensa, que las Fuerzas Armadas iban a ser sometidas a una especie de terapia de humillación y desmoralización por parte del gobierno. Han sido utilizadas como moneda de cambio de la absurda política exterior zapateril (unas tropas al Congo para contentar a unos, otras al Líbano para contentar a otros) y en cambio se ha evitado utilizarlas para lo que de verdad están (por ejemplo, para apoyar a la Guardia Civil en las aguas del Estrecho de Gibraltar, continuamente hostigadas y humilladas por la policía gibraltareña y la Royal Navy).
    Las funciones básicas del Estado son la defensa nacional, la seguridad y la justicia, y resulta que todas ellas sufren de escasez presupuestaria (las fuerzas armadas se ven privadas de un armamento moderno que necesitan, los policías tienen que costearse los chalecos antibalas con su propio dinero y no tienen munición suficiente para hacer prácticas de tiro, la administración de justicia funciona con unos equipos informáticos desfasados…) mientras otras partidas de gasto público totalmente superfluas crecen cada vez más. La explicación es sencilla: estos politicuchos carecen de sentido de Estado, y su acción de gobierno está guiada, no por el interés general y el sentido de la responsabilidad, sino por el puro interés partidista, por una ideología sectaria y por el clientelismo.
    Por otro lado, supongo que el interés de Arabia Saudita, en el terreno defensivo, está en contrarrestar el poderío persa; es decir, esos carros de combate son un acto de refuerzo frente a Irán. Me parece a mí que esa venta de armamento pone en evidencia la olímpica memez que es la Alianza de Civilizaciones.
     
     
     
     
     

  3. ¿Para qué queremos ejército teniendo la Alianza de las Civilizaciones?  La guerra es una cosa facha, yanki y anticuada…  Nosotros somos un país moderno, progresista y pacifista.
     
    Que Marruecos tenga una imponente y creciente fuerza de infantería (unidades de combate ofensivo), no tiene por qué preocuparnos, somos super amigos chupi guay…
     
     

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