Sin León no hubiera España …

… que antes que Castilla leyes, concilios, fueros y reyes dieron prestigio a León …

Inusitada e insólita la reacción del nacionalismo rancio español, del inmovilismo patrio y el colectivismo internazionalista ante el legítimo derecho de un pueblo a manifestar su voluntad de ver reconocida su historia en el marco constitucional actual. Un marco legal que reconoce esos derechos a todos: los cántabros, los del condado de Barcelona, los del señorío de Vizcaya, hasta los riojanos tienen derecho a joderse ellos solos y sus viñedos si así lo deciden. Ah, pero los leoneses no. Si 10.000, o 3.000 o 500 leoneses provincianos salen a la calle a reclamar lo que es suyo corre la sorna por los pasillos y el tracatraca de la soflama barata. Hipócritas amantes de España que ignoran su historia y cual condesitos de romance plebeyo prefieren las nupcias pactadas que les aseguren cuatro heminas más de pasto y veinte fanegas de bosque para cazar.

Hipócritas los socialistas, capaces de enfangarse los codos con asesinos vascuences, sacar tajada de la timba catalana, perpetuar el cortijo extremeño y andaluz para venderlo todo luego por dos legislaturas y unas buenas pensiones.

Hipócritas los españolistas que no pudiendo gritar aquello de «España Una, Grande y Libre» se aferran al actual marco constitucional con gesto agarrotado y tragando bilis, prietas las nalgas e impasible el ademán. Lo de la «España plural» suena en sus labios como lo de «es una prima mía» en los del adúltero pillado in fraganti.

Hipócritas!

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Luis I. Gómez
Luis I. Gómez

Si conseguimos actuar, pensar, sentir y querer ser quien soñamos ser habremos dado el primer paso de nuestra personal “guerra de autodeterminación”. Por esto es importante ser uno mismo quien cuide y atienda las propias necesidades. No limitarse a sentir los beneficios de la libertad, sino llenar los días de gestos que nos permitan experimentarla con otras personas.

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16 comentarios

  1. Con bastante retraso desde la fecha del post, pero históricamente León era una región independiente. Fue el invento de esa cosa llamada Castilla y León lo que termino con esa división política.
    Un saludo

  2. Vorzheva no considero ninguno de los comentarios anteriores un ataque personal. el tuyo, como amiga, menos. El PSOE, efectivamente, hace uso electoralista del movimiento leonesista. Pero ello es posible porque este existe. No es un invento del PSOE, ni lo es de hace cuatro días.
    Siento por tus amigos que esas sean sus únicas aspiraciones. No son las mías. El peso específico de España como nación ya está minado por la asimetría de la micronización autonómica. El sistema de administraciones menores no es el error, sino cómo han abusado de él los de siempre.
    Sólo de la unión (lo que implica RENUNCIA) de pequeñas voluntades nace una idea de peso. Pretender aglutinar la diversidad en nombre de una idea no es lo mismo, y no tiene peso. Es un acto asumido (pasivo), no actuado(activo).
    Estoy convencido de que si tuviésemos el valor de romper la baraja, dejar que cada uno se pusiese en «su sitio», el resultado final (una España de leoneses, castellanos, gallegos, vascos, andaluces, … que quieren SER España) sería mucho más creíble que lo que tenemos hoy. Y su capacidad de influencia, por supuesto, mucho mayor.

  3. No creo que disentir de tí en esto sea un ataque personal. A mí no me entra la risa por esto, a mí me da pena. La fragmentación en un mundo globalizado (que es un fenómeno que crecerá en Europa, porque erróneamente creemos que estamos al final de la evolución) sólo disminuirá su influencia e incrementará las de otras latitudes.
    Creo que todo esto es una manipulación MUY interesada por parte del Partido Socialista que ataca todo lo que suene a unidad. Castilla y León era de las pocas que no se había visto salpicada por estos movimientos y han encontrado un filón con lo de León. Tengo amigos leoneses y lo que en el fondo les molesta es que la capital de la Comunidad Autónoma esté en Valladolid y no en León.
    Nuevamente, las Comunidades Autónomas se prueban como algo idiota y poco efectivo. La organización territorial debería haber contemplado sólo las provincias. Menos gobiernos territoriales, menos gastos, más cercanía al ciudadano y menos baronías.

  4. Yo sólo contestaba a Major Tom pero, si conociese al Yuste, también le gritaría 😉 la familia que me queda es socialista.

  5. Sin restar ni un ápice de validez a lo argumentado por Major_Tom y (*) permítanme que les recuerde dónde están y comentan. Parece que lo han olvidado.

    Me permito la desfachatez de reivindicar una administración para León desde el contexto de mis ideas, no desde el contexto de las suyas o, lo que sí sería grave, de los oligarcas y señores feudales hijos de la constitución del 78, amamantados por la debilidad de todos los gobiernos democráticos hasta la fecha.
    Acaso deja de ser justa una reivindicación por el destrozo que otros han hecho de ella? Acaso deja de tener validez el principio de minimalización de la administración por la circunstancia de que quienes pudieron ponerlo en practica se negaron a ello, acomodados en sus sillones de señoritos new wave y dilapidando los dineros de todos?

  6. ¿Qué cabe esperar de un gobierno socialista, que no socializa, sino que monopoliza lo público para ponerlo a disposición de lo privado, de la federación catalana de su propio partido? El tiempo, que no vuelve ni tropieza, ha de decidir cómo se avienen en ese lecho de Procusto tantas y tan distinguidas gentes, en cuyo interior, además, pide derechos especiales de pernada la iglesia de los secesionistas de los últimos días. Partido Socialista Oligárquico Expañol, de la España que fuera o fuese…

    Mientras tanto, ¿Nunca desaparecerá de escena nuestro crítico gastronómico favorito, el político unificado polivalente? Los líderes quizá no necesitan una preparación específica para sus cargos y lo mismo planchan huevos que fríen corbatas. Cogno, lo imposible no ha sido que Raúl González rotase por el banquillo, lo imposible, como siempre, es sacar los comodones de la baraja española: uno que gobierna su autonomía luciendo como minijjtro de manifestaciones, otro que era del ejército del aire liderando a la guardia civil, la alcaldesa saliente, embajadora ante el Dalai Lama, su esposo o esposa, viceconserje de la alianza de civilizaciones, etc. Arcanos cuasinsondables, la Casa del Dragón nos gobierna: los Targaryen se sacralizan a sí mismos, se aparean unos con otros y no necesitan el menor perfil profesional porque, cuando el poder es absoluto, todos los perfiles son buenos y todas las fotos mejores.

    Bueno y luego, qué?? Quizá algunos mejorarán a la corta pero todos perderemos a la larga, ya que no es posible el juego de suma cero en el estado del bienestar multinacional y multicultural. Alguno tiene que pagar la factura de los platos rotos y de las riquezas derrochadas. ¡A gastar, con zeta o sin ella!! El que venga detrás que arree, guerra al principio de responsabilidad. Como es notorio, el endeudamiento de las CCAA y de los propios ciudadanos crece vertiginosamente; las políticas de apoyo a los grupos culturales del pesebre será nuevamente la misma de antaño; las políticas de integración verán engordar sus gastos a favor de un oenegeo cazafondos que pone la anestesia para suavizar la amputación del Estado que le nutre, y de una marginalidad que engorda mes a mes; las uniones libres, multinacionales y algebraicamente complejas seguirán aumentando así como la inexistencia de medidas de ayuda a la formación del propio hogar; la cultura de derechos sin deberes se extenderá, los beneficios y privilegios de algunas autonomías terminarán desvertebrando cualquier hipótesis de españolidad… y como resultado llegará el término y el exterminio de la política de déficit cero, menos uno, menos cinco…; mas, dado que el estado se endeudará con todo eso pero yo no, todos felices, yo y nadie, pero los más desgraciados más felices todavía. ¿Esto era la “modernidazzzz”, lectores del El País?

  7. Espero que los herederos de Altamira reclamen su derecho a la administración de las mismas. En fin, que la misma historia de los paniaguados que se autodenominan ‘decentes’, no posicionandose ni con nacionalistas, e insultando a todos los demás (la moda es el nacionalismo español, ¡uh! ). En fin, después serán los mismos que lloren cuando en tal sitio se usen las instituciones públicas para el bien privado o para el nacionalismo y el que intente solucionar eso de otra forma, será considerado un malvado nacionalista español.

  8. (***) El libro está leído y mejor que el libro muchos de tus comentarios. Quedan ahí como freno a mi desembocada estulticia emocional unas veces, como espejo que obliga a la duda otras.
    El apego a lo particular es algo absolutamente sensato desde el que nacen, inevitablemente, el desapego y la generosidad. Nadie puede compartir aquello de lo que no es consciente poseer. Yo reclamo para León el derecho a recuperar esa consciencia. El derecho a equivocarnos solos.
    Jorge, no es cuestión de que nos venga mejor, es cuestión de que nada de lo que ocurra podrá ser ya «culpa» de otros. La Conquista, por cierto, comenzó en Covadonga -cuenta la leyenda- y León sólo fue capital del Reino de León. Durante un breve período de tiempo hubo un Rey que se nombró Emperador, pero dudo que ningún historiador reclame como hecho la capitalidad de «España», que de aquella no existía. No es cuestión sólo de historia -que también- es cuestión de que León ha sido SIEMPRE unidad administrativa, hasta la cagada (perpetrada por los meapilas españolistas a los que me refiero en el post, con la bendición de los colectivistas profesionales e ignorando la voluntad de los leoneses, que de aquella salían de 40.000 en 40.000 a la calle) de 1978.

  9. Dicen los asturianos: Asturias es España y el resto tierra conquistada. La conquista la empezó D. Pelayo en León, la ciudad de León fue capital de esa España, pero desde entonces mira que ha llovido.
    Una pregunta; ¿con León como C.A. les irá mejor a los leoneses?.

  10. Jo macho.

    Bueno, lo que quise respetuosamente decir es que no es sólo la españolez: hoy día también el apego a lo particular resulta difícil cuando no hay un político empleando tus impuestos en convencerte de quién eres y cómo debes entenderte.

    En el fondo lo de los fetdiferentialpihtecus ha tenido cierto mérito aunque se descompondrá al contacto con el frío relente globalizado, como dice Marx que le ocurrió al imperio manchú…tú puedes ponerle a Sergio Javier una cabeza sobre los hombros, lo que no puedes es infundirle coraje. Lean el libro ese, por favor.

  11. snipfer, sabes que yo no soy anexonista de nadie. y sabes que lo único que yo defiendo es el derecho a que le pregunten a la gente dónde quierre estar y cómo quiere ser admnistrado. Así que no me vengas con anexionismos.Los salmantinos y los zamoranos estarán donde ellos decidan. Y los leoneses también.

  12. Luis, el Reino de León tuvo su momento, evidentemente, pero bastante ridículamente atrás en el tiempo como para tratar de usar eso para justificar una anexión de Zamora y Salamanca. En fín, que también podríamos tratar de llevar a cabo una fragmentación territorial de toda Europa siguiendo el mapa tuyo como modelo.

  13. Se lleva mucho tiempo intentando la despersonalización, esto es, que el personal pierda de vista su condición, ejem, personal, y se vea como organismo reducido a las otras formas de realidad; a última hora, reducible a lo inorgánico. Por supuesto, sin libertad, sometido a leyes naturales físicas, biológicas, sociales, psíquicas, económicas, susceptible de toda manipulación desde todas esas instancias. En efecto una serie de relevos han borrado el carácter personal de las personas humanas.

    Esta actitud ha solido ir acompañada de un extraño deseo de aniquilación, la voluntad de extirpar en los demás la esperanza de que los reyes, a pesar de todo, no fueran los padres. Se puede descubrir algo que, en el fondo, no se entiende: un terror a la supervivencia, acaso a la responsabilidad, a las exigencias del afecto.

    De la España pasada casi todo parece haber sido barrido: ni memoria de Prisciliano ni del divinoArgüelles parece quedar. Pocos recuerdan de forma activa la historia, en cuyo lugar se ha instalado la historieta. Ensimismados, ¿qué español de cierta edad no habrá desayunado con Eleazar, comido con Schumpeter y cenado con Paris Hilton? ¿Mañana? Mañana será otro día.

    En esta mutante transmisión falta lo transmitido; en su lugar se han instalado los folclores, conmemoraciones animadas ideológicamente y subvencionadas con cargo a los PGE, pero cada vez más vacuas. Cuando de ellas desaparecen el alco-gol y el seso, el ruido y la furia, entonces la fiesta pierde su sentido.

    Nada denota nostalgia del haber sido y todo apunta hacia una improbable euforia y un contentamiento banal cruzado por dos ejes, hedonismo y relativismo, barnizado de tolerancia cuando no es más que em-bud-ología light. No hay pan bastante blando para el que no tiene hambre y ni siquiera es, sino que está: “estoy en el móvil”.

    Paisaje al fondo, nada con dinero. Es esta una infecundidad que tiene su trasunto en la esterilidad biológica, la cual, a su vez se traduce en envejecimiento demográfico. La naturaleza se alaba a sí misma y ahí termina todo.

    La voluptuosidad fragmentaria de la posmodernidad ha desvirtuado el discurso y la pereza de los propios ha propiciado la pesca en río revuelto de los extraños; dormidos en los laureles, no hemos conservado vivo el lecho cultural desde el que lo personal se aprehende; cegados sus alvéolos, cualquiera ha podido arrasar a cara descubierta con sonrisa Profidén, luz, taquígrafos y cámaras: imperio impune. La tela de araña detiene al mosquito pero deja pasar a los moscardones.

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