Nuevos puntos de vista sobre el 11M

Ya os había anunciado que Copypaste estaba ocupándose del tema e los explosivos en el11M.

La cosa cmenzaba con un Una impúdica cadena de mentiras de Luis del Pino:

A ver que me entere. Así que el componente X, la sustancia sobre cuya presencia en los análisis se basa esta desacreditación de Sánchez del Manzano, lo mismo está en las pastillas de encender barbacoa, en las pastillas del riñón de mi abuela, en el desodorante de un tedax, en desinfectantes de uso tópico y sobre todo en el humo del tabaco. Vaya. Así que “casualmente” se le contaminan muestras de dinamita con componentes de explosivos militares. Antes de hacer afirmaciones tan gruesas conviene leer un poco sobre la sustancia de la que habla. Del Pino ha demostrado un conocimiento cuasi-enciclopédico de la ciclonita, podría haber echado un ratillo aprendiendo cosas sobre la metenamina que no paraba de mencionar. Tengan en cuenta que del Pino desacredita una posible contaminación sin pringarse en cuestiones técnicas, por la vía rápida, por la vía de la demasiada casualidad.

Luego nos refería a un colega blogger, Jota, que escribía en su Botella al mar:

Algún lector malhumorado me preguntará por qué no he comenzado por aquí. Bastaba este argumento para destrozar el artículo de Del Pino. Lo sé, con esto me hubiera bastado. Pero tal vez me ha podido un poco la vanidad. En el curso del debate, éste fue el último argumento que encontré. Al no disponer del sumario, no había caído en la cuenta de la confusión entre A y E, pero aún así había logrado desmontar a Del Pino. La segunda razón es que quiero blindar el argumento, no haciéndolo depender de una sola letra. La tercera es que todos mis argumentos, me parece, revelan la increíble falta de profesionalidad de Del Pino, y finalmente eso es mi motivación principal: mostrar con un ejemplo que no admite réplica la malevolencia y las falacias que conforman la metodología habitual de la teoría conspiranoica

Llegado a este punto, profundamente indignado, me pregunto yo: ¿a qué nivel puede llegar la irresponsabilidad o mala fe de un “periodista” que, incapaz o renuente a hacer lo que yo he hecho con unas pocas horas de investigación, se lanza a fondo a acusar de embustero a un profesional que se ha pasado la vida arriesgándola para proteger a la ciudadanía? ¿A qué nivel de vileza se puede llegar para calumniar de esta forma a una persona? ¿De verdad todo vale en el sucio juego de la manipulación periodística al servicio de una causa política? Goebbels estará sonriendo desde su tumba.

Ya está Copypaste rematando la faena con su siguiente entrega, Goma 2 Vs Explosivo militar estilo C-4:

Ah, ya entiendo, el clásico bulto nada sospechoso consistente en un volumen equivalente a tres tetrabriks de leche adosados a la pared de un tren. O Debajo de un asiento. Je, je, como en las películas, pones el C-4 adhesivo en la pared, conectas el detonador temporizado y te largas. La cosa cambia cuando lo que tienes que pegar en esa pared es un señor bulto de aproximadamente 3 litros. O lo que sea. Señor del Pino, por el amor de Dios, un bulto de aproximadamente 7 litros no es mucho menos visible que un bulto de aproximadamente 3 litros. Y la manera razonable de transportarlo en ambos casos es en una mochila. ¿Sabe por qué? porque entre otras cosas las mochilas son de lo menos sospechoso que hay, ocultan su contenido y son cómodas. Metralla aparte, que esa es otra, usted solo se acuerda de la metralla si desaparece de un juzgado.

Vaya, vaya…

Luis I. Gómez
Luis I. Gómez

Si conseguimos actuar, pensar, sentir y querer ser quien soñamos ser habremos dado el primer paso de nuestra personal “guerra de autodeterminación”. Por esto es importante ser uno mismo quien cuide y atienda las propias necesidades. No limitarse a sentir los beneficios de la libertad, sino llenar los días de gestos que nos permitan experimentarla con otras personas.

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